miércoles, 12 de febrero de 2014

Cómo fomentar la lectura desde pequeños

Las experiencias tempranas con libros favorecerán el interés del pequeño y propiciarán que éstos formen parte de su realidad cotidiana.
En una sociedad en la que el 47% de la población no lee nunca o casi nunca, es muy importante que desde muy pequeños los niños se familiaricen con la lectura. Nunca es demasiado pronto para empezar. Aquí te presentamos los libros más adecuados para cada edad.
De 0 a 24 meses
Aunque te parezca demasiado pequeño un libro puede ser un juguete más. Cómprale libros interactivos con colores vivos en los que haya personajes escondidos y objetos. La tapa no debe ser ni muy dura ni muy blanda para que las pueda morder.
La historia deberá ser breve, sencilla y con un principio y final claro que tú deberás leerle en voz alta. Enséñale los dibujos y explícale el cuento en imágenes, incluso haciendo tu las onomatopeyas y los gestos para que sea más fácil entenderlo.
De 2 a 4 años
En esta edad ya se conocen más o menos sus gustos así que léele libros de temas que le gusten antes de irse a la cama.


Ya son conscientes de cómo es un libro, de las letras, de las palabras y de que las ilustraciones tienen que ver con ellas. Hazle responsable del cuidado del libro.
La lectura deberá realizarse a diario y déjale que él escoja el libro, aunque sea el mismo varios días.
También puedes ir aumentándole el volumen de texto y libros con historias más complejas para que su nivel de lectura vaya creciendo con él.
Es importante hacerle preguntas y no limitarnos sólo a leer como "¿qué pasará después"? o "¿Qué crees que le hará?".
Los libros más adecuados para esta edad son los que contengan rimas y cancioncillaspara que el niño las recuerda fácilmente y con muchas ilustraciones.
A partir de 4 años
A esta edad ya pueden leer ellos mismos. Les ayuda bastante leer los mismos libros que sus amiguitos del colegio o relacionado con temas que estén aprendiendo allí. Aprenderá a leer correctamente, a seguir una historia capítulo a capítulo y fomentará su imaginación. 

Aparte de libros también puedes comprarle revistas infantiles para que practique aún más y también le puedes mandar recados que ayuden a su lectura y escritura como hacer la lista de la compra.
Ya pueden leer libros con menos ilustraciones pero el texto deberá tener frases cortas para su mejor comprensión y deberá tratar de temas de su vida real.
¿Qué puedes hacer tú?
1. Dar ejemplo: Los adultos somos su modelo. Lee delante de ellos.
2. Escuchar: Estate pendiente de sus dudas.
3. Compartir: El placer de la lectura se contagia leyendo juntos.
4. Proponer, no imponer: No trates la lectura como una obligación.
5. Acompañar: El apoyo de la familia es esencial. No le dejes solo cuando aparentemente sepa leer.
6. Ser constantes: Todos los días reserva tiempo para leer.
7. Respetar: Tienen derecho a elegir. Presta atención a sus gustos.
8. Pedir consejo: El colegio, las bibliotecas y las librerías son excelentes aliados.
9. Estimular, alentar: Deja libros apetecibles a su alcance.
10. Organizarse: La desorganización está reñida con la lectura. Ayúdale a organizar su biblioteca particular